Norepinefrina más dopamina vs norepinefrina más adrenalina en el manejo del choque séptico refractario en la UCI del HERCG en el periodo Octubre 2015 – Enero 2016

El manejo hemodinámico del shock está destinado a mantener el aporte de oxígeno por encima de un umbral crítico y a aumentar la presión arterial media a niveles que permitan una apropiada distribución del volumen minuto cardiaco para lograr una adecuada perfusión orgánica. (1) Uno de los primeros ob...

Descripción completa

Autor Principal: Alemán Garay, Eduardo Moisés
Formato: Tesis
Idioma: Español
Español
Publicado: 2016
Materias:
Acceso en línea: http://repositorio.unan.edu.ni/1623/
http://repositorio.unan.edu.ni/1623/1/90409.pdf
http://repositorio.unan.edu.ni/1623/7/88x31_cc.png
Sumario: El manejo hemodinámico del shock está destinado a mantener el aporte de oxígeno por encima de un umbral crítico y a aumentar la presión arterial media a niveles que permitan una apropiada distribución del volumen minuto cardiaco para lograr una adecuada perfusión orgánica. (1) Uno de los primeros objetivos en el tratamiento de los pacientes críticos es restaurar y mantener una oxigenación tisular adecuada, ya que la hipoxia tisular juega un rol importante en el desarrollo de la disfunción orgánica múltiple, causa frecuente de muerte en la población de pacientes críticos. (1-2) Muchos pacientes internados en terapia intensiva requerirán de la administración de drogas vasoactivas durante su permanencia en la unidad. En sentido amplio, estos agentes pueden ser clasificados en agentes vasopresores, que aumentan la presión arterial; e inotrópicos, que mejoran la función miocárdica. (1) Los agentes vasopresores aumentan la presión arterial media, lo que aumenta la presión de perfusión orgánica y preserva la distribución del volumen minuto cardiaco a los distintos órganos. El mantenimiento de una presión sistémica adecuada es esencial para una suficiente perfusión tisular. Cuando la presión arterial media disminuye por debajo del rango de autorregulación de un órgano, el flujo sanguíneo decrece, resultando en isquemia tisular y fallo orgánico. Los agentes vasopresores también mejoran el volumen minuto cardiaco y la disponibilidad de oxígeno disminuyendo la compliance del compartimento venoso y aumentando de este modo el retorno venoso. (1-3) Es por tanto que la utilización adecuada de los distintos agentes vasopresores en la etapa crítica del choque séptico es uno de los pilares principales para el manejo de los pacientes, donde los objetivos terapéuticos están definidos en pro de contrarrestar la hipoperfusión celular y consecuencias de la misma.