Señores del Banco Central “lo que es bueno para el ganso, deberá ser bueno para la gansa”

Hace un par de semanas les conté sobre las comisiones asociadas a la existencia de los datafonos y la perversa presencia de un oligopolio de emisores de tarjetas. Les contaba sobre la ineficiente regulación que ha seguido el país y la permisiva y complaciente actitud del Banco Central para con l...

Descripción completa

Autor Principal: Vargas Alfaro, Leiner
Formato: Artículo de periódico
Idioma: Español
Publicado: Delfino.cr 2021
Materias:
Acceso en línea: http://hdl.handle.net/11056/21848
https://delfino.cr/marcandolapauta/leiner-vargas
Sumario: Hace un par de semanas les conté sobre las comisiones asociadas a la existencia de los datafonos y la perversa presencia de un oligopolio de emisores de tarjetas. Les contaba sobre la ineficiente regulación que ha seguido el país y la permisiva y complaciente actitud del Banco Central para con los bancos adquirientes y emisores de plásticos en el sistema financiero nacional. De igual forma, les conté de la ley 9831 y su reglamentación, que obliga al Banco Central a fijar topes o límites máximos en dichas comisiones. Hoy quiero contarles con detalle de que se trata este procedimiento y quiénes de manera directa o indirecta han venido quebrando el brazo de las autoridades del Banco Central y claramente, incidiendo en una regulación incorrecta, siguiendo discrecionalmente normas y principios técnicos no acordes con la realidad del mercado costarricense y mucho menos con la mejor marca o norma internacional a que los obliga la ley.