Uso de misoprostol para inducción del parto y su relación con asfixias neonatales en el Hospital Militar Escuela Dr. Alejandro Dávila Bolaños en el periodo comprendido de Enero a Diciembre 2017

El compromiso mundial de alcanzar los objetivos del milenio, entre los cuales está la disminución de dos tercios la mortalidad de los menores de 5 años, entre 1990 y el 2015, ha llevado a los países de la región y a Nicaragua a incrementar los esfuerzos y a lograr una reducción significativa de este...

Descripción completa

Autor Principal: Martínez Jiménez, Marlin María
Formato: Tesis
Idioma: Español
Español
Publicado: 2018
Materias:
Acceso en línea: http://repositorio.unan.edu.ni/10111/
http://repositorio.unan.edu.ni/10111/1/99306.pdf
http://repositorio.unan.edu.ni/10111/2/cc.jpg
Sumario: El compromiso mundial de alcanzar los objetivos del milenio, entre los cuales está la disminución de dos tercios la mortalidad de los menores de 5 años, entre 1990 y el 2015, ha llevado a los países de la región y a Nicaragua a incrementar los esfuerzos y a lograr una reducción significativa de este indicador; sin embargo, es necesario profundizar aún más en la prevención y tratamiento oportuno de la morbilidad y la morbilidad severa neonatal. (3) El embarazo de alto riesgo es aquel que tiene pronóstico materno y/o fetal potencialmente subóptimo en comparación a un embarazo de bajo riesgo. Se estima que alrededor de un 20% de los embarazos corresponde a la denominación de alto riesgo y ellos son responsables de más del 80% de los resultados perinatales adversos, por lo cual se deben identificar las embarazadas que requieran de una mayor vigilancia y cuidado a consecuencia de presentar factores de riesgo claramente identificables, sea antes o durante el embarazo como estrategia de prevención para complicaciones, fin con el que existe el control prenatal, que consiste en un conjunto de acciones sistemáticas y periódicas destinadas a la prevención, diagnóstico y tratamiento de los factores que puedan condicionar morbilidad o mortalidad materna o perinatal. (2) Existen problemas perinatales como: la prematurez, asfixia, malformaciones congénitas, infecciones; y desde el punto de vista materno: la hemorragia obstétrica, las infecciones, síndromes hipertensivos del embarazo y enfermedades maternas pregestacionales, que requieren de estrategias orientadas a la prevención, diagnóstico y tratamiento oportuno. (2) Es importante optimizar la salud materna antes de la concepción para mejorar el resultado perinatal, ya que hasta un 30% de las mujeres embarazadas inicia su control durante el segundo trimestre (>13 semanas de edad gestacional), esto es especialmente importante en algunos grupos de mujeres, como aquellas con enfermedades pregestacionales (diabetes, hipertensión, lupus), deficiencias nutricionales (anemia, bajo peso) y exposición a teratógenos (alcohol, warfarina), en las cuales el cuidado preconcepcional ha mostrado reducir la morbimortalidad neonatal. (2) El riesgo se define como la probabilidad que tiene un individuo de experimentar un daño, en perinatología o medicina materno-fetal, el riesgo es evaluado en relación a daños específicos para la madre o el hijo. Se denomina factor de riesgo a aquella característica biológico, ambiental o asociación farmacológica, que cuando está presente en un individuo se asocia con un aumento de la probabilidad de experimentar un daño. Existen indicaciones para inducir o acelerar el trabajo de parto si este progresa demasiado lento, no se ha desencadenado naturalmente o hay factores de riesgos maternos y/o fetales que justifican el uso de métodos farmacológicos que den como resultado un parto vaginal. (3) La inducción es la estimulación del útero mediante métodos que se caracterizan por iniciar de manera artificial la actividad uterina que conducen al borramiento y dilatación del cuello, se debe diferenciar de la conducción, que significa mejorar la labor de parto cuando este ya se ha iniciado espontáneamente, es decir ya existen contracciones y dilatación a nivel del cuello uterino, el objetivo es conseguir contracciones cada 2- 3 minutos, con una duración entre 40 a 50 segundos y una intensidad de 50 – 60 mmHg. (2)